martes, 15 de marzo de 2011

RESUMEN ARTICULO 5

LA MITOCONDRIA Y EL CORAZÓN de J. Marín García  y M. J. Goldenthal.

Las anomalías en la función y estructura mitocondrial se han encontrado cada vez con mayor frecuencia asociadas a enfermedades cardiovasculares, algunas anomalías mitocondriales pueden tener una base genética, por ejemplo los cambios en el ADN mitocondrial que producen una disfunción de la fosforilación oxidativa, o los defectos en la oxidación de los ácidos grasos debido a mutaciones específicas del ADN nuclear.

Las mitocondrias son muy abundantes en el corazón, la producción energética mitocondrial depende de factores genéticos codificados por el núcleo y por el ADNmt. A medida que avanza la edad de los individuos existen cambios metabólicos en el músculo cardiaco como el aumento de los ácidos grasos saturados y la reducción de los poliinsaturados y la cardiolipina, ésta última es el principal componente de la membrana mitocondrial interna, también aumenta la tasa de mutaciones y deleciones en el ADNmt cardiaco, lo cual se ha asociado al aumento de radicales libres.

En las miocardiopatías se han documentado defectos en la fosforilación oxidativa o en la cadena respiratoria, las miocardiopatías se asocian a menudo a mutaciones puntuales patogénicas específicas en el ADNmt. Estas mutaciones son localizadas en nucleótidos altamente conservados a lo largo de la evolución, las cuales se suelen acompañar por niveles reducidos de la actividad de enzimas respiratorias específicas.

Se han descrito además mutaciones con pérdida de sentido en el citocromo b, que es la única subunidad del complejo III codificada por la mitocondria.

Las mutaciones en un amplio grupo de genes nucleares que codifican proteínas mitocondriales pueden causar miocardiopatías. Por ejemplo mutaciones en proteínas transportadoras mitocondriales.

Existen evidencias de que las mitocondrias desempeñan un papel fundamental en las fases tempranas de la apoptosis. Se han desarrollado modelos animales para el estudio de enfermedades cardiovasculares asociadas a las mitocondrias, cuya mayor parte se ha hecho con ratones con mutaciones o depleciones específicas en el ADNmt.

Todos estos antecedentes han sentado las bases para un mejor diagnostico y tratamiento de enfermedades cardiacas producidas por alteraciones mitocondriales.

Lo que sigue es avanzar en las investigaciones para establecer terapias génicas o con células madre las cuales proponen identificar las mutaciones, eliminarlas y reincorporar los genes en sus formas silvestres.

FUENTE:
Marín-García J. y Goldenthal M.J. 2002. La mitocondria y el corazón. Rev Esp Cardiol 55(12): 1293-1310.

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